Frutos maduros de Ganoderma lucidum crecidos sobre un sustrato formulado a base de cáscara de girasol. Por Maximiliano Andrés Bidegain* (becario en el Laboratorio de Hongos Comestibles y Medicinales del CERZOS-Conicet)

El Ganoderma lucidum es conocido también como Lingzhi en China, y en Japón como Reishi (“Hongo Divino”) o Mannentake (“Hongo de los 10.000 años” o “de la inmortalidad”). Recientemente en Occidente se lo ha llamado el “políporo panacea”. Su nombre deriva del griego ‘ganos’ (‘brillo’, ‘resplandor’), mientras que ‘lucidum’, que en latín significa ‘brillante’ hace referencia al aspecto rojo brillante del hongo fresco. Llámese Linghzi, Reishi o Ganoderma lucidum, este hongo ha sido reverenciado en Oriente durante miles de años por su reputación medicinal. Sin embargo, no ha sido sino hasta hace poco que se comenzó a estudiar con rigor científico en nuestro hemisferio. Cabe preguntarnos ahora, ¿qué tan merecida es la fama de este hongo? Sostiene la leyenda que el emperador Shennong, llamado el “agricultor divino”, hace unos 5.000 años enseñó a su pueblo los secretos de la agricultura y hierbas medicinales. Shennong lucía transparente y podía probar distintas hierbas y sus efectos directamente observando lo que sucedía dentro del cuerpo. Sus conocimientos se plasmaron en el Shennong Ben Cao Jing, un compendio de hierbas medicinales considerado la primera farmacopea china, que habría sido escrita mucho después, a partir de tradiciones orales. Entre las 365 drogas tratadas en el libro, figura el Lingzhi, un hongo capaz de potenciar la energía vital, el “qi”, y prolongar la vida. Tal era la reputación de este hongo que cuando fue encontrado creciendo en la madera del palacio imperial de Kan-ch’uan durante su construcción, fue reconocido como un buen augurio y se enviaron emisarios por todo el mundo en busca de este raro y muy apreciado hongo. Rápidamente el conocimiento de los atributos de Lingzhi se expandió a Corea y Japón, donde se lo elevó al estatus reverencial. Tales eran las propiedades medicinales de este hongo, que durante algún tiempo se creyó que podía devolver la vida a los muertos.

Este hongo de forma arriñonada, cuando es fresco es chato y en su parte superior es rojizo y suave, y en su parte inferior posee poros blancos a marrones, según su madurez. Crece sobre árboles envejecidos, especialmente de bosques subtropicales. Sus características morfológicas varían con las condiciones medioambientales. Solo 2 o 3 de cada 10.000 de estos árboles tendrán crecimiento de Ganoderma, por ello es sumamente raro encontrarlos en la naturaleza. Hoy la ciencia ha puesto su arte en el cultivo artificial de este y otros hongos comestibles y medicinales.

Un desarrollo realizado en el Laboratorio de Hongos Comestibles y Medicinales del CERZOS (CONICET-UNS) usa la cáscara de la semilla de girasol, un residuo abundante de la industria aceitera de nuestra región, como sustrato para el cultivo de Gírgolas, Shiitake y también para el Reishi. La capacidad biotransformadora de estos organismos permite así convertir un residuo abundante de escaso valor en productos de alto valor económico. Si bien las propiedades medicinales del Reishi se han conocido por milenios en Oriente, no ha sido sino hasta los ’80 que comenzó a estudiarse en Occidente. Se le han atribuido numerosos efectos terapéuticos entre los que pueden mencionarse algunos tan importantes como los anticancerígenos, antivirales (incluso contra el virus HIV), hipocolesteromiantes y antihipertensivos. Se lo usa particularmente cuando el sistema inmune se ve comprometido, fundamentalmente debido a su efecto activador sobre dicho sistema. Sus efectos beneficiosos se deben a los más de 400 componentes bioactivos, especialmente a los ácidos ganodéricos que le dan al hongo su característico sabor amargo, además de ser potentes agentes antitumorales, y también a los polisacáridos, que tienen un efecto inmunorregulador. Algunos de tales efectos son:

  • Anticancerígenos: actualmente se está estudiando su uso como coadyuvante en la terapia contra el cáncer, con resultados muy positivos tanto en la actividad antitumoral como en el tratamiento de los efectos adversos de los quimioterápicos comúnmente utilizados.
  • Antiinflamatorios: se han aislado compuestos con gran actividad antiinflamatoria y escasos efectos adversos.
  • Actividad anti-envejecimiento: debido a su actividad antioxidante se está investigando su uso en productos dermatocosméticos, además de favorecer una vida más larga y saludable por su valor adaptógeno.
  • Actividad inmunoreguladora: balanceando al sistema inmune.
  • Actividad hepatoprotectora.
  • Actividad antidiabética: se ha demostrado que ciertos componentes incrementan la insulina en sangre y con eso llevan a una reducción de la glucemia.
  • Actividad antibacteriana y antiviral: además de la ya mencionada actividad contra el HIV, se están estudiando sus efectos en contra del virus del herpes.
  • Actividad hipocolesterolémica: inhiben la producción endógena de colesterol.
  • Actividad antihipertensiva.
  • Actividad anti-insomnio: prolongan y mejoran la calidad del sueño.

Otro punto a favor de este hongo es su escasa toxicidad. Varios estudios científicos han demostrado la ausencia de efectos adversos tras el consumo deGanoderma tanto a corto como a largo plazo. Uno de los pocos puntos en contra que podemos mencionar es que este hongo, a diferencia de otros medicinales como el Shiitake, no es comestible debido a su sabor amargo y consistencia leñosa. Sin embargo, es posible la preparación de infusiones a partir del cuerpo de fructificación desecado y actualmente están en desarrollo suplementos dietarios a base de este hongo. Vemos entonces que los antiguos chinos no estaban equivocados en cuanto a los propiedades beneficiosas de Ganoderma lucidum y que Lingzhi tiene su gloria muy bien ganada.

Maximiliano Andrés Bidegain es farmacéutico egresado de la Universidad Nacional del Sur. Actualmente es becario en el Laboratorio de Hongos Comestibles y Medicinales del CERZOS y forma parte del grupo de investigación que lleva a cabo el proyecto de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica “Producción y comercialización del hongo Reishi (Ganoderma lucidum)”. Está  realizando su doctorado bajo la dirección de la Dra. M.A. Cubitto.
Compartí esto!