En los últimos años, la dieta sin gluten se ha popularizado, no sólo entre quienes padecen la enfermedad de celiaquía, sino también entre aquellos que realizan distintas dietas antiinflamatorias y consideran que la alimentación gluten free es más saludable. Los trastornos del sistema inmunitario, es decir, de nuestras defensas, tienen lugar cuando éstas atacan y destruyen nuestros propios órganos o tejidos. Es lo que ocurre con la celiaquía y hace años hay gastroenterólogos que indican que aún en personas no celíacas el gluten puede producir importantes síntomas autoinmunes.
Aquí exploramos algunas de las ventajas de adoptar una dieta sin gluten o también llamada sin TACC (por las siglas de trigo, avena, cebada y centeno).
1. Mejora la digestión
Muchas personas reportan una notable mejora en la digestión al eliminar el gluten de sus dietas. Los síntomas como hinchazón, gas, diarrea y dolor abdominal, que a menudo se asocian con sensibilidad al gluten, pueden disminuir significativamente o desaparecer.
2. Reduce la inflamación crónica
El gluten puede provocar inflamación en personas con sensibilidad al mismo. Esta inflamación puede manifestarse en diversas formas, desde dolor en las articulaciones hasta fatiga crónica. Eliminar el gluten puede ayudar a reducir estos síntomas y promover un estado general de bienestar.
3. Incrementa energía
Muchos consumidores de dietas sin gluten reportan un aumento en sus niveles de energía. Esto puede deberse a la mejora en la absorción de nutrientes y la disminución de la inflamación intestinal, lo que permite una recuperación general del organismo.
4. Prevención de enfermedades autoinmunes
Para las personas con enfermedad celíaca, el consumo de gluten puede desencadenar una serie de problemas de salud serios, incluyendo el riesgo de otras enfermedades autoinmunes. Una dieta sin gluten es crucial para la prevención y manejo de estos riesgos.
Conclusión
Una dieta sin gluten no solo es esencial para quienes tienen enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten, sino que también puede ofrecer beneficios generales de salud, promoviendo un estilo de vida más saludable y consciente. En una tienda de alimentos naturales promover estos beneficios puede ayudar a educar y motivar a los consumidores a tomar decisiones alimenticias que sustenten tanto su bienestar físico como mental.
